Pasan los años y los avances tecnológicos crecen cada vez más, las necesidades del usuario final son exigentes y los fabricantes buscan garantizar la operatividad de sus productos para satisfacción de sus clientes y con un fin lucrativo a todo costo. Esto nos hace reflexionar que en ese afán de estar a la par con la carrera tecnológica se deja de lado, o hay menos interés, en la protección del medio ambiente.
Según la PNUMA (Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente), actualmente se generan cerca de 50 millones de toneladas, de aparatos electrónicos que son desechados anualmente. Esto es que debido al crecimiento tecnológico, surge la necesidad de dar de baja equipos en estado obsoleto e inservible y no existen procedimientos que permita darle un mejor destino a estos, sin perjudicar el tema ambiental.
La tasa de crecimiento de estos residuos electrónicos obsoletos alcanzará dimensiones de crisis si las empresas y/o fabricantes, llámese HP, Dell, Lenovo, IBM, etc y etc., que obtienen lucros elevados de la producción y venta de estos aparatos, no asumen sus responsabilidades. Es posible hacer productos sin sustancias químicas peligrosas, duraderos, que pueden ser mejorados, reciclados o eliminados de forma segura y que no acaben como residuos peligrosos en el patio de atrás, en la cochera, en el techo o de quienes ni siquiera disponen de la tecnología adecuada para gestionarlos.
¿Qué tipo de elementos químicos u otras actividades producen riesgo?
El cromo, usado para las cubiertas de metal, por ejemplo en los CPU, es cancerígeno; el cadmio, presente en la composición de baterías recargables, daña los huesos y los riñones; y el mercurio, infaltable para producir iluminación en monitores CRT, es nocivo para el sistema nervioso y el cerebro; el plomo, que potencia el deterioro intelectual, ya que tiene efectos perjudiciales en el cerebro y todo el sistema circulatorio. Incluso se conoce que muchos de estos desechos son enviados a África y terminan como juguete para los niños.
¿Qué posibles soluciones se pueden dar?
-Reducir la generación de desechos electrónicos.
-Donar o vender los equipos electrónicos que todavía funcionen.
-Donar equipos rotos o viejos a organizaciones que los reparan y reutilizan con fines sociales.
-Reciclar los componentes que no puedan repararse. Hay empresas que acopian y reciclan estos aparatos sin costo para los dueños de los equipos en desuso.
-Promover la reducción de sustancias peligrosas que se usan en ciertos productos electrónicos que se venden en cada país.
-La responsabilidad extendida del productor en la cual luego de su uso por los consumidores el propio productor se lleva el producto, esto los impulsa a mejorar los diseños para que sean más sencillos de reciclar y reutilizar.12
-En algunos países se piensa en todo el ciclo de vida de un producto. Se multa a la gente que no se comporta responsablemente luego de consumir. Incluso algunos productos tienen una tasa destinada a resolver la exposición final de esos materiales.
-Las propias empresas deberían contar con un sistema de reciclaje de sus propios productos, así todo el planeta se beneficiaría.